Hay una sanadora argentina viajando y haciendo milagros de sanidad. ¿Que podemos pensar de ella? ¿Podemos buscar en ella sanidad?

No puedo decir si realmente hace milagros o no. No creo que sea muy probable, pero no descarto la posibilidad. Pero, el hecho de hacer milagros no necesariamente dice que viene de Dios.

No todo el que me dice: “Señor, Señor”, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de Mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: “Señor, Señor, ¿no profetizamos en Tu nombre, y en Tu nombre echamos fuera demonios, y en Tu nombre hicimos muchos milagros?”. (Mat 7:21-22) Y, Jesús responderá: «Entonces les declararé: “Jamás los conocí; APÁRTENSE DE MÍ, LOS QUE PRACTICAN LA INIQUIDAD. (Mat 7:23)

Es evidente que no todos los que hacen milagros son de Cristo. Si ella llevara gente a Cristo para salvación según la Biblia (por gracia, por medio de fe con arrepentimiento y siendo bautizado en Cristo) sería una cosa. Otra cosa es que lleguen a rezar a María y los santos y someterse al Papa y venerar objetos, reliquias, e íconos. Los que llevan gente a la iglesia católica estorban el camino a la verdadera fe. Una persona verdaderamente de Dios debe llevar gente a la verdad del Nuevo Testamento. No puedo hablar de su corazón, si hace el error con intención o por ignorancia. Sin embargo, podemos observar las palabras de Pablo:

La venida del impío será conforme a la actividad de Satanás, con todo poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, porque no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esto Dios les enviará un poder engañoso, para que crean en la mentira, a fin de que sean juzgados todos los que no creyeron en la verdad sino que se complacieron en la iniquidad. Pero nosotros siempre tenemos que dar gracias a Dios por ustedes, hermanos amados por el Señor, porque Dios los ha escogido desde el principio para salvación mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad. Fue para esto que Él los llamó mediante nuestro evangelio, para que alcancen la gloria de nuestro Señor Jesucristo. Así que, hermanos, estén firmes y conserven las doctrinas que les fueron enseñadas, ya de palabra, ya por carta nuestra. Y que nuestro Señor Jesucristo mismo, y Dios nuestro Padre, que nos amó y nos dio consuelo eterno y buena esperanza por gracia, consuele sus corazones y los afirme en toda obra y palabra buena. (2 Tes 2:9-17)

Si una persona trae enseñanza que no apunta hacia amor a la verdad, la retención de la sana doctrina del Evangelio de Cristo, la verdadera fe, y la santificación ha de ser evitado.

Dios es muy capaz de sanarnos. A veces lo hace y a veces no. Que un verdadero cristiano corra tras una persona que no retiene sana doctrina solo para buscar sanidad, está poniendo la sanidad de su cuerpo por sobre la verdad de Dios. Para llegar a la salvación final tenemos que amar la verdad del Evangelio más que los beneficios temporales de algo como lo que estamos viendo.

Si queremos sanidad debemos hacer lo que la Biblia pide. Oración constante, pidiendo la cooperación de los ancianos de la Iglesia, y sometiéndonos a la voluntad de Dios, sea la respuesta Sí o No.

Si temes que negar lo que hace puede ser blasfemia del Espiritu Santo, vea aquí: Cuestionamiento imperdonable: el pecado imperdonable, falsos profetas y el discernimiento

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