La Prevalencia del Error

A veces uno se deprime al ver todas las opiniones disponibles en YouTube. Encuentras un día un montón de unitarios (los que niegan la Trinidad y, por ende, la deidad de Cristo). Los que conocen la Escritura saben que hay muchos textos que apuntan a la deidad de Cristo (Jn 1:1; 1 Jn 5:20, p.ej.). Uno que está trabajando por tener la actitud de Cristo no se enoja, sino que se preocupa por la salvación de tal persona y los que son influenciados por la enseñanza falsa. Luego, hay algunos ultradispensacionalistas que creen que solamente ciertas cartas de Pablo son para todos los cristianos, las demás cartas (también los Evangelios y Hechos) son solamente para judíos.  Por otra mano, hay algunos diciendo que Pablo fue un falso Apóstol y que hay que rechazar todo lo que dijo él, incluyendo la salvación por gracia. Hay apólogos que han ido a la iglesia católica, ahora apoyando idolatría de María y los “santos” y bajando el perfil de la Palabra de Dios, la Escritura. Claro también hay aquellos que dicen que la Escritura no es la Palabra de Dios ya que Jesús es el Logos (Palabra). Otros dicen que la Biblia contiene la palabra de Dios, pero no es la palabra de Dios. Piensan que lo que se recibió de Jesús fue distorsionado por los escritores (por su memoria falible, la incapacidad de idiomas humanas, o presión cultural). Todos estos teman la «bibliolatría«. Todas estas falsedades se pueden desmentir con un poco de estudio cuidadoso, y con humildad y amor.

Pero, a veces, la cantidad de errores es fuerte. No es que hay muchos cristianos fieles y algunos equivocados. Es que vemos a muchos ataques. Algunos vienen del mundo… es de esperar. Lo que sorprende y deprime es la cantidad que viene desde varios segmentos de la cristiandad. Claro, para los que estudian la Biblia no es una sorpresa por completo.

Textos Bíblicos Advirtiendo De Herejías

  • Cuídense de los falsos profetas, que vienen a ustedes con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. (Mat 7:15)
  • Porque muchos vendrán en Mi nombre, diciendo: “Yo soy el Cristo”, y engañarán a muchos. Ustedes van a oír de guerras y rumores de guerras. ¡Cuidado! No se alarmen, porque es necesario que todo esto suceda; pero todavía no es el fin. (Mat 24:5-6)
  • Sé que después de mi partida, vendrán lobos feroces entre ustedes que no perdonarán el rebaño. También de entre ustedes mismos se levantarán algunos hablando cosas perversas para arrastrar a los discípulos tras ellos. Por tanto, estén alerta, recordando que por tres años, de noche y de día, no cesé de amonestar a cada uno con lágrimas. (Hch 20:29-31)
  • El Espíritu dice claramente que en los últimos tiempos algunos se apartarán de la fe, prestando atención a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios, mediante la hipocresía de mentirosos que tienen cauterizada la conciencia. Esos prohibirán casarse y mandarán abstenerse de algunos alimentos, que Dios los ha creado para que con acción de gracias participen de ellos los que creen y que han conocido la verdad. Porque todo lo creado por Dios es bueno y nada se debe rechazar si se recibe con acción de gracias; porque es santificado mediante la palabra de Dios y la oración. (1 Tim 4:1-5)
  • Porque vendrá tiempo cuando no soportarán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oídos, conforme a sus propios deseos, acumularán para sí maestros, y apartarán sus oídos de la verdad, y se volverán a los mitos. (2 Tim 4:3-4)
  • Pero se levantaron falsos profetas entre el pueblo, así como habrá también falsos maestros entre ustedes, los cuales encubiertamente introducirán herejías destructoras, negando incluso al Señor que los compró, trayendo sobre sí una destrucción repentina. Muchos seguirán su sensualidad, y por causa de ellos, el camino de la verdad será blasfemado. (2 Ped 2:1-2)
  • Ellos salieron de nosotros, pero en realidad no eran de nosotros, porque si hubieran sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros. Pero salieron, a fin de que se manifestara que no todos son de nosotros. (1 Jn 2:19)

Muchas advertencias que varios problemas vendrían por los que supuestamente son cristianos, algunos siendo lideres. Jesús nos advirtió. Pablo también. Pedro y Juan también. Parece ser un tema que había que conversar con frecuencia. Parece caótico. ¿Cómo podemos estar confiados y tranquilos frente tanta confusión y herejía?

La venida del impío será conforme a la actividad de Satanás, con todo poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, porque no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esto Dios les enviará un poder engañoso, para que crean en la mentira, a fin de que sean juzgados todos los que no creyeron en la verdad sino que se complacieron en la iniquidad. Pero nosotros siempre tenemos que dar gracias a Dios por ustedes, hermanos amados por el Señor, porque Dios los ha escogido desde el principio para salvación mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad. Fue para esto que Él los llamó mediante nuestro evangelio, para que alcancen la gloria de nuestro Señor Jesucristo. Así que, hermanos, estén firmes y conserven las doctrinas que les fueron enseñadas, ya de palabra, ya por carta nuestra. Y que nuestro Señor Jesucristo mismo, y Dios nuestro Padre, que nos amó y nos dio consuelo eterno y buena esperanza por gracia, consuele sus corazones y los afirme en toda obra y palabra buena. (2 Tes 2:9-17)

7 Tips Para No Ser Hereje

  1. Hay que amar la verdad. El concepto que hay verdad objetiva que debemos conocer y aceptar es clave en un mundo de relativismo y pluralismo. Hay una verdad conocible porque el Dios que existe nos ha hablado por Su Palabra escrita (la Biblia) y por Su Hijo encarnado (el Logos hecho carne).
  2. Hay que creer en la verdad. No es suficiente tener conocimiento de la verdad. Es necesario activamente depender de ella. Nuestra confianza no puede ser en nuestros corazones ni en nuestro intelecto. Siempre tenemos que depender de la verdad de Dios.
  3. Hay que ser santificados por el Espíritu. Hay que buscar la santidad, apartarse del mundo con sus pecados para dedicarse a Dios por completo (cuerpo y alma). Los que aman a Jesús guardan Sus mandamientos. Los que no quieren ser santos caerán en mentiras.
  4. Hay que ser leales a la verdad. Una idea estrechamente relacionada con la “fe” es la lealtad. Fidelidad, ya que Dios es fidedigno. Cuando creo en la verdad del Evangelio, no es solamente una creencia más entre muchos. Es vida. Es el mensaje de Dios para nosotros. Es algo que Él obró sobre miles de años con cuidado y precisión. Merece nuestra fidelidad.
  5. El centro de lo que creemos es el Evangelio. Las buenas nuevas de Jesucristo. Que Dios se encarnó. Que Dios encarnado murió en la cruz por nuestros pecados y fue levantado de entre los muertos en el tercer día. Que volvió al Cielo donde se sentó a la diestra de la Majestad. Que volverá como Señor de Señores y Salvador de los que andan en Él. Que ofrece perdón y gracia a todos los que vienen a Él con fe y arrepentimiento, siendo bautizados para perdón de pecados y el don del Espíritu Santo, el sello de la salvación.
  6. Hay que estar firmes en estas cosas básicas. Las doctrinas fundamentales debemos repasar con frecuencia para saber que no hemos sido movidos por las olas de doctrina y las artimañas del error. Este conjunto de enseñanzas fue entregado a nosotros en forma escrita. Tenemos que afirmarnos, luchar ardientemente, y seguir con perseverancia. Hay muchos errores buscando desviarnos de la verdad del Evangelio.
  7. Esperamos consolación del Señor mientras seguimos en buenas obras y hablando la verdad. Él puede consolarnos cuando estamos preocupados. Debemos llevar fruto que será la evidencia de que estamos firmemente conectados a la Vid.

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